Y bueno, hoy se lanzó oficialmente el 2022 Update (22H2).
Me contagié con el hype, y dije "voy a instalarlo a ver que tal". Sabía a lo que iba: la barra de tareas seguía sin poder expandirse (función clave para mi workflow porque trabajo con muchos programas abiertos a la vez, varias instancias de Chrome con perfiles diferentes, y me gusta además el 1-click a cualquier cosa que necesite, en Windows y también en macOS). Era algo que en el papel se podía corregir con una App llamada Start11, de Stardock. Confirmé por Twitter con sus encargados, y efectivamente era capaz de restaurar esa opción. Así que me tiré a la piscina.
The taskbar is getting taller.
www.stardock.com
El año pasado, cuando probé la primera versión (21H2), duré unos 15 a 20 minutos, y decidí desinstalarlo de inmediato. No lo soporté. Era horroroso, además que la decepción de encontrarme con múltiples limitaciones mató "la flor" de inmediato.
Este año, duré un poco más de minutos (1 hora app.). Lamentablemente Start11 no es suficiente: tiene lag, algunos bugs y se nota que claramente no es parte del sistema. Es una App bienintencionada que trata hacer lo que puede, pero no lo logra del todo. Puede que sea porque mi Notebook tiene una pantalla 4K, no lo sé. Pero al hacer clic en iconos se demoraba 2 o 3 segundos en reaccionar a veces, algo que en Windows 10 siempre es instantáneo.
Pero lo que sí me preocupó es haber notado Lag y deficiencias en otras áreas del sistema: por ejemplo, yo trabajo todo con OneDrive y SharePoint (mis cosas personales, y laborales). El lag al explorar por carpetas era insoportable. Revisé en Google y no son pocos los que reclaman por lo mismo desde el año pasado, algo que supuestamente se había arreglado.
En conclusión: con 22H2 se nota un avance, pero insuficiente. El taskbar, como dije más arriba, sigue estando incompleto. Le faltan funciones para los power users. Probablemente para el público general va a ser siempre 'más que suficiente' y no se quejarán (porque no usan más de 2 o 3 programa srealmente). Y también probablemente Start11 sirva para la mayor parte de quienes necesitan restaurar algún tipo de funcionalidad relacionada con el menú Inicio. Pero no funciona bien del todo.
Así que, nuevamente volví a Windows 10. Esta vez de hecho el proceso del roll back tuvo menos problemas que el del año pasado (tuve que reparar varias veces la Windows Store porque no me dejaba instalar Apps ni Updates, pero ahora, más que volver a agregar unos iconos en el taskbar, no tuve dramas.)
Toda esta etapa me recuerda a los años 2007 y 2008 de Windows Vista, donde Microsoft trató de reparar con cualquier cosa dicho OS, lanzando múltiples Service Packs y Updates, y la percepción nunca cambió. Se lanzaban Notebooks de grado empresarial con Windows XP preinstalado porque la mala fama ya estaba hecha. Microsoft luego se rindió y comenzó a desarrollar Windows 7, encima de Vista, y le resultó bien. El problema es que ahora no hay una intención clara de hacer las cosas bien. O van muy lento. En un año no se notó mucho.
Microsoft dice que durante octubre y en algunos meses más seguirá liberando mejoras, poco a poco. Yo veo eso como "respiros" a un producto que ya no prendió, especialmente en el enterprise. No me extrañaría que el 2023 sepamos de "Windows 12", que se armará "encima" de Windows 11, pero con falencias importantes recuperadas, como el famoso Taskbar, que, hasta el "cierre de esta edición", seguía sin poder moverse nativamente a los otros bordes de la pantalla, como ha sido posible desde 1995.
Un mínimo porcentaje de gente le gusta cambiarla de posición y/o expandirla. Pero ese porcentaje existe, y somos ruidosos. Y vamos a seguir haciendo ruido hasta que nos devuelvan esa posibilidad.