Ambas partes son culpables, y ambas deben de ser sancionadas. Hubo fallas graves en la organización: allí la culpa es exclusiva de Independiente. Pero en el tema de barras bravas, allí sí que ambos equipos tienen responsabilidad. Se portaron ambas como animales, y sí, hay que reconocer que el comportamiento de la barra de la U desencadenó todo. Y también hay responsabilidad de los dirigentes de ambos equipos: los defienden, los tratan como parte importante de la “familia futbolera”, y si bien es verdad que no hay datos claros, todas esas barras bravas, de alguna manera, están subvencionadas por los dirigentes, que los ven como una fuerza de choque. Les regalan entradas, por ejemplo. Como aficionado al fútbol, y como ser humano, sería ideal que a raíz de esta tragedia, existan sanciones duras, ejemplares, y que se produzca un cambio real. ¿La verdad? Conociendo a la FIFA, y sobre todo a la Conmebol, lo dudo mucho. Pero en fin.